Te convertiste en esa inspiración que llegaba cada mañana
en ese cosquilleo en el fondo de mi piel
En los momentos que escribía,
en el dolor más fuerte y la sonrisa más enorme
Eres esas madrugadas en las que me despierto a escribir
esa necesidad de un papel y una pluma,
te convertiste en el todo de mi nada
en el siempre de mis nuncas.

sábado, 1 de agosto de 2015

56.- Lapso

Y lo que sucede es que me da miedo fallarte, me da miedo equivocarme.
Tengo miedo de hacer contigo lo que haces tu conmigo.
Intento jugar contigo y escupir tu cara de la manera que escupes la mía, pero lo único que consigues son mis pétalos en tus mejillas.
Me parece que sacas tu lado rudo simplemente para ver si así cambio el lado de la moneda y golpeo un poco tus días, si sacudo un poco tu vida.
Este lapso no es ya solo un lapso, comienza a ser un modo de vida, una regla de vida.

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